Las intensidades de entrenamiento en cada sesión se definen en 5 ZONAS DE INTENSIDAD
basadas en porcentajes de la frecuencia cardíaca máxima o en ritmos (min/km). Con las zonas de frecuencia cardíaca puedes seleccionar y controlar fácilmente las intensidades del entrenamiento. Esto es vital para ajustar tus sesiones de entrenamiento a los objetivos definidos de cada sesión, haciendo así cada sesión muy efectiva y eficiente.
El entrenamiento en la ZONA 1
se realiza a una intensidad muy baja. El principio más importante del entrenamiento es que el rendimiento mejora al recuperarse después, y no durante el entrenamiento. Puedes acelerar el proceso de recuperación con un entrenamiento a muy baja intensidad.
El entrenamiento en la ZONA 2
está indicado para el entrenamiento de resistencia, una parte esencial de cualquier programa de entrenamiento. Las sesiones de entrenamiento en esta zona son fáciles y aeróbicas. El entrenamiento de larga duración en esta zona de baja intensidad tiene como resultado optimizar el gasto de energía. Deberás ser persistente para ver progresos.
La potencia aeróbica se mejora en la ZONA 3. La intensidad del entrenamiento es superior a la de las sport zones 1 y 2, aunque sigue siendo principalmente aeróbica. El entrenamiento en la sport zone 3 puede consistir, por ejemplo, en intervalos seguidos de períodos de recuperación. El entrenamiento en esta zona resulta especialmente eficaz para mejorar la circulación sanguínea en el corazón y en los músculos esqueléticos.
Si tu objetivo es competir a tu máximo potencial, tendrás que entrenar en las ZONA 4
y ZONA 5. En estas zonas, el ejercicio es anaeróbico, en intervalos de hasta 10 minutos. Cuanto más corto sea el intervalo, mayor será la intensidad. Es muy importante recuperarse suficientemente entre intervalo e intervalo. El modelo de entrenamiento en las zonas 4 y 5 está diseñado para producir un rendimiento máximo.
Las zonas objetivo son individuales y personalizadas para cada deportista. Cuando te entrenes en una zona objetivo con pulsaciones, intenta hacer uso de toda la zona. La zona media es un buen objetivo, pero no es necesario mantener tu frecuencia cardíaca en ese mismo nivel todo el tiempo. La frecuencia cardíaca se ajusta gradualmente a la intensidad del entrenamiento. Por ejemplo, al pasar de la zona de frecuencia cardíaca 1 a la 3, el sistema circulatorio y la frecuencia cardíaca se ajustarán en un período de 1-3 minutos.
La frecuencia cardíaca responde a la intensidad del entrenamiento según varios factores, como el nivel de forma física y la rapidez de recuperación, además de factores ambientales. Es importante tener en cuenta la sensación de fatiga y ajustar el programa de entrenamiento en consecuencia.
Tu entrenador te ofrecerá tu tabla personalizada con tus pulsaciones/ritmos y zonas de intensidad personales
para que puedas llevar a cabo tus sesiones entrenando adecuadamente con tu pulsómetro de forma mucho más eficaz y eficiente. Entrenarás menos tiempo obteniendo mejores resultados y reduciendo el riesgo de lesiones por sobreuso.